Yom Hazikarón, Día del Recuerdo y Homenaje a los soldados caídos y a las víctimas del terrorismo

Miércoles, 22 de abril de Yom Hazikarón 2015 Yom Hazikarón es un momento especialmente solemne y marcado por ceremonias y silencios en todo el país. Se extiende desde la puesta de sol a sol, en 2015, a partir de abril 21 a 22, y es seguido inmediatamente por Iom Haatzmaut, el Día de la Independencia de Israel. Yom Hazikarón empieza al anochecer (20:00) cuando una sirena sonará en todo el país durante un minuto. Todo el mundo deja de hacer lo que están haciendo, incluyendo la conducción de automóviles en la carretera, y observa el silencio para mostrar su respeto y recordar a los caídos. Esa noche, la ceremonia oficial del Estado con motivo del comienzo de Iom Hazikarón se lleva a cabo en el Muro Occidental (Kotel) en Jerusalén. A diferencia de muchos otros países, las guerras de Israel han tenido lugar en el país, y de ser un país pequeño, casi todo el mundo conoce a alguien que murió en las guerras del país haciendo Yom Hazikarón un momento muy personal de recuerdo.

Joven terrorista palestino apuñala a un soldado israelí que logra reducirlo y detenerlo cerca de Oranit

Joven terrorista palestino apuñala a un soldado israelí que logra reducirlo y detenerlo cerca de Oranit Un joven terrorista palestino apuñaló e hirió levemente hoy, jueves, en la cabeza y el hombro a un soldado israelí que logró reducirlo (foto) y detenerlo en un puesto de control cerca de Oranit, en el norte de la Margen Occidental.

Paramédicos del Maguén David Adom (versión israelí de la Cruz Roja) trataron al efectivo, de 22 años, en el lugar y luego lo trasladaron al hospital.

“La Fuerza de Defensa de Israel arrestó a seis palestinos que saltaron la valla situada cerca del puesto de control de Transamaria”, informó en un comunicado.

En tanto, el Shin Bet (Servicio de Seguridad) identificó al agresor como “un menor de edad de la ciudad de Tulkarem” que no tenía antecedentes de haber participado en actividades hostiles.

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Soldado israelí logra reducira terrorista palestino que le apuñaló

El racismo de Israel

De esclavo a oficial de las FDI:
La historia de un guineano

Cuando sólo tenía 15 años, Avi Be’eri fue vendido a traficantes de esclavos que lo introdujeron de contrabando a Israel desde Guinea, se las arregló para cambiar su vida y ahora se convertirá en un oficial de las FDI

Smadar Shir

Ynetnews

Publicado: 05.03.11 / Israel News

AVI BE'ER EL OFICIAL DE GUINEA.jpg

[Avi Be’eri: yo era un niño inocente (Foto: Portavoz de las FDI)]

La historia de la vida de Avi Be’eri podría, fácilmente, convertirse en una exitosa telenovela. Comenzó con la muerte de sus padres en Guinea, continuó con los traficantes de esclavos contrabandeándolo a Israel y llega hasta el curso de oficiales de las FDI, que debe completar el martes.

El joven de 21 años, cuyo verdadero nombre es en realidad Ibrahim, nació en la ciudad de Labe, en Guinea. Cuando tenía un año de edad, su padre murió de cáncer y él y su madre fueron a vivir con su tío. Su madre siempre hizo hincapié en la importancia de una educación e, incluso, ahorró dinero para mandarlo a la escuela. Pero murió cuando él tenía sólo 13 años de edad y se quedó solo en el mundo.

La vida en casa de su tío fue dura y por eso se escapó al mercado local, ayudando a los comerciantes a cambio de un lugar para dormir por la noche. Un día sintió que su suerte estaba a punto de cambiar, uno de los comerciantes le dijo que en Israel era posible ganar $3,000 por mes. El comerciante se ofreció a pagarle el pasaje de avión a cambio de un porcentaje del sueldo mensual de Ibrahim.

«No sabía nada acerca de Israel», dice en su fluido hebreo. «Era un niño inocente y pensaba que realmente quería ayudarme».

Avi llegó a El Cairo con sólo una pequeña mochila y nada más. El contacto local lo estaba esperando. «Éramos ocho africanos, nos puso bajo una gran frazada en un camión y comenzó a conducir», recuerda Avi.

«Durante todo el viaje la voz de mi madre estuvo haciendo eco en mi cabeza diciendo ‘te vendieron como esclavo’». El viaje a Israel fue un infierno permanente. «Por la noche viajábamos y, a lo largo del día, beduinos armados nos vigilaban. Una noche llegamos a Eilat y de allí a Tel Aviv.”

En la estación central de autobuses de Tel Aviv se quedó solo. «Tenía 15 años, el único tipo negro entre los blancos», dijo. «Me di cuenta de alguien era del mismo color que yo y le pregunté dónde dormían los trabajadores migrantes”. Avi comenzó a trabajar como lavaplatos y otros trabajadores migrantes le dijeron que enviara una carta al Comité de Refugiados de las Naciones Unidas en Jerusalem.



Salvadores especiales

La respuesta fue que no reunía los requisitos para el estatus de refugiado, ya que «no hay guerra en Guinea». Entonces fue enviado a Shanti House en Tel Aviv – un hogar para niños en riesgo. «Tuve que escapar para ganar dinero», recuerda. «Sabía que si era deportado a Guinea sin el dinero que le debía, el comerciante que me compró el pasaje de avión me mataría”.

Sin embargo, poco tiempo después de su llegada, Avi fue arrestado por la policía de inmigración. Fue trasladado a un centro de acogida como candidato a la deportación. Parecía que sus peores temores estaban a punto de hacerse realidad.

Los salvadores de Avi fueron Susana y Azion Oshri, del asentamiento comunal de Massad. Ellos le dieron la bienvenida en su casa. Bajo su patrocinio Avi regresó a la escuela y apeló al entonces Ministro del Interior acerca de su estatus. El ministro decidió darle al caso una consideración especial y le otorgó una ciudadanía israelí.

Cuando recibió su documento de identidad cambió su nombre a Avi – haciéndolo oficial. Después de completar sus estudios y recibir su diploma de la escuela secundaria, Avi se enroló en las FDI.

El martes completará el curso de oficiales y entonces será promovido al grado de Teniente Segundo. «Realmente me siento como alguien que está haciendo historia», dice con orgullo. «¿Quién hubiera creído que yo, que llegó a este país sin nada, estuvo en prisión y estuvo cerca de ser deportado, se convertiría en un oficial de las FDI, serviría como edecán de las FDI y ayudaría a israelíes a integrarse en el ejército?»

Avi ya tiene grandes planes para su futuro. «Siento que todas las puertas están abiertas para mí y me veo como un judío en todos los sentidos. Mi siguiente desafío es convertirme, casarme y formar una familia. Quiero ir a la universidad y estudiar Relaciones Internacionales y luego trabajar en el Ministerio de Relaciones Exteriores para promover las relaciones de Guinea con Israel. Mi sueño es contribuir tanto como pueda a este país. No hay suficientes palabras para expresar mi agradecimiento».


http://www.ynetnews.com/articles/0,7340,L-4063352,00.html

Traducido para por israel.org por José Blumenfeld

Gentileza: www.porisrael.org

Primera mujer árabe soldado del ejercito israelí

Itongadol.20/9/2010

Elinor Joseph, una joven árabe cristiana de Haifa, concluyó una etapa importante de su entrenamiento de combate en el batallón Karakal del ejército israelí siendo, desde ahora, la primera mujer árabe soldado de combate en la historia de las FDI. Creció en un barrio judío-árabe. Asistió a una escuela árabe y, más tarde, se mudó a un barrio árabe. Su padre sirvió en la Unidad de Paracaidistas de las FDI, pero nunca pensó que podría alistarse. «Quería ir al extranjero a estudiar medicina y no volver nunca más», dijo al portavoz de las fuerzas. Su padre esperaba que realizase el servicio militar, pero «tenía miedo de perder a mis amigos ya que se oponían. Me dijeron que no me hablarían nunca más. Y me quedé sola.»

A pesar de la oposición, se alistó. «Decidí ir cabeza a cabeza», dijo, «para comprobar quiénes son mis verdaderos amigos y hacer algo que nunca había hecho. Entendí que era más importante defender a mis amigos, familia y país. Yo nací aquí (…) con el tiempo, cuando se hacen las cosas desde el corazón, se entiende su importancia». Pensaba que me gustaría ser médica de combate, pero «el oficial responsable de personal se rió en mi cara y me dijo que era demasiado delicada. Empecé a llorar.» Luché para recibir una alta calificación médica; la suficiente para ser aceptada en la unidad de combate. Sin embargo tardé muchos meses hasta recibir una posición de combate.

«Los árabes también matan árabes»
Después del entrenamiento de formación básica, Elinor tomó un curso destinado a médicos, en donde fue seleccionada como soldado destacada del curso. Fue asignada a un puesto de policía militar en el cruce de Kalkilya, al este de Kfar Saba. «Lo disfruté [y] me gustó la gente de allí», recuerda, aunque se sentía movilizada por el dilema de servir en un cruce fronterizo. Durante los momentos de dificultad y recelo, dice: «Me gustaría recordar que un Katiuska disparado por Hezbollah cayó cerca de mi casa y perjudicó a los árabes. Si alguien me dice que servir en las FDI significa matar árabes, les recuerdo que los árabes también matan árabes». «En los puestos de control traté a todos de la misma manera; todos somos humanos. Por esta razón, nadie reaccionó, contra mi, de manera negativa, y, a decir verdad, es algo que me sorprendió». «La gente sabía que estaba allí y que no me callaría. Era un recordatorio permanente sobre cómo tratar a los palestinos de buena manera. Pero de verdad, el trato siempre estaba lleno de respeto».

Poco después, se probó para entrar en una posición de combate en el Batallón Karakal. Fue aceptada, a pesar de la voluntad de su comandante que se quedara en la Guardia de Fronteras. «Al principio, extrañaba estar en la policía militar». «Las relaciones con la gente eran muy diferentes. Los conocía, no sólo personalmente, sino desde el punto de vista médico, creando una conexión muy íntima con cada uno. Pero me di cuenta que estaba en un lugar nuevo. Llegué a conocer a las personas poco a poco y, ahora, realmente los quiero a todos».

Parte del Estado judío
En el marco de su servicio militar y su entrenamiento de combate, Elinor notó el énfasis que se puso siempre en la identidad judío-ética del país, tanto en situaciones específicas y en el mensaje general que se pasa a los soldados. “No la detuvo”, dice. «Sé que soy parte del Estado judío del ejército y, por tanto, cuando hablamos, escucho y aprendo. Me acostumbré y lo respeto, sin ahondar demasiado en la identidad del país. Tengo mi propia identidad y respeto a la del país”.
Ahora mismo, después de terminar su entrenamiento de combate, dice, de todo corazón, que no se arrepiente: «Es una satisfacción para completar las cosas difíciles. Siento que en el ejército maduré y me hizo más responsable de lo que solía ser (…) siempre fui respetada no sólo yo, sino también mis costumbres y mi religión (…) Mis padres están muy orgullosos de mí, tal vez demasiado”.
Por otra parte, «Sé que algunos padres de jóvenes no se entusiasman si sus hijos salen conmigo a causa de mi servicio militar, por el hecho que soy un soldado de combate. También hubo personas que leyeron sobre mí y reaccionaron de manera dolorosa. Aprendí a no prestar atención. Estoy convencida de lo que hago».

Elinor considera que ser soldado de combate significa que concede, a todos los ciudadanos israelíes, entre ellos los árabes-israelíes como sus padres, una vida mejor y más tranquila. «Sigo creyendo que la paz llegará, y la fe crea la realidad». (IsraelNationalNews.com)

Traducción: Asuntos Públicos. Embajada de Israel en Argentina

«Nunca más niños judíos mirarán con miedo»

«Al igual que todos los residentes de Plovdiv mi familia también abrió las puertas de su casa en 1943, para encontrar agentes de la policía búlgara, quienes ordenaron que se prepararan para ser deportados del país en cuestión de horas».


«Junto con otros 6,000 miembros de la comunidad, mi padre también fue colocado en el patio de la escuela sabiendo muy bien a dónde iba. Conocían muy bien las historias de la aniquilación de judios de Europa en los campos de concentracion. No tenían ninguna duda de que se dirigían a un lugar del que no había retorno.»

Su padre escapó a la muerte en el último minuto gracias a la revocación de la orden de deportación.

«En el nombre de mi padre y su familia, que soñaban con un país soberano e independiente, y en nombre de todos los millones que nunca llegaron a presenciar la realización de su sueño, estoy aquí hoy como el comandante de las fuerzas de defensa judías, de las Fuerzas de Defensa de Israel, y se me comprometo en nombre de todos nosotros: nunca más nos veremos indefensos y a misericordia de otros.»

«Nunca más niños judíos mirarán con miedo pidiendo ser perdonados. Nunca más permitiremos que nuestros enemigos determinen el destino del pueblo judío y vamos a poder proteger a nuestros hijos.»

Gabriel (Gabi) Ashkenazi

Fuerzas de Defensa de Israel

Extraido de: Aurora Digital

El pueblo judío nunca más se verá indefenso